SEVILLA, Polígono Sur ha compartido la noticia

DESDE GUADALINFO DENUNCIAMOS LA AGRESION AL PROFESOR DEL COLEGIO LA PAZ DE POLIGONO SUR

La última agresión a un docente en el Polígono Sur, el miércoles en el colegio Nuestra Señora de la Paz —donde el padre de un chico golpeó a un profesor que había mediado en una discusión de varios miembros de la familia del menor con otro maestro— ha terminado por colocar definitivamente en primera línea de la actualidad las dificultades, hasta el peligro, con que conviven muchos de los que desarrollan su labor profesional en esa problemática zona de Sevilla.Los incidentes y las agresiones se vuelven a acumular en los últimos tiempos. Igual que se ha atacado a médicos en Pino Montano o El Greco, en el Polígono Sur y las barriadas que lo conforman, colectivos como los taxistas, repartidores de correo, conductores de autobús, empleados de Lipasam, profesores, comerciantes, trabajadores sociales o los propios médicos vienen trasladando en los últimos meses sus quejas y una desesperada petición de mayores medidas de seguridad en la zona.Los enfrentamientos entre clanes gitanos que desembocaron en agosto en el tiroteo que acabó con la vida de una niña de 7 años hizo que volvieran a saltar las alarmas de las administraciones, que salieron al paso con anuncios y discursos para frenar la inquietud de la opinión pública. Se intentó ocultar la pelea para la elección de relevo para Jesús Maeztu al frente del Comisionado, pero al final afloró. Se intentó tapar la tensión por la ubicación y construcción de la esperada comisaría —años lleva de retraso—, pero finalmente también relució y sigue sin anunciarse nada en torno a la financiación. La Junta de Andalucía destituyó al jefe de la Policía Autonómica y el nuevo ordenó que volviera la presencia de esos agentes a la zona. Pero los vaivenes de las administraciones no han variado el panorama ni mejorado la sensación de seguridad. Más bien al contrario, los problemas en ese sentido no cesan.Entre los profesionales que desarrollan su actividad en este sector de la capital andaluza se reclaman soluciones. Y se hace en dos vertientes. La vida misma. Todos coinciden en que se trata de un problema enraizado en la educación, que es donde se debe incidir. De eso hablan, cómo no, los profesores y educadores sociales que trabajan en esos barrios, pero también muchos de los médicos y enfermeros. Sobre todo porque éstos desarrollan una tarea con un fuerte componente educativo.Un guardia en la puertaPero muchos médicos tienen miedo, evidentemente. «Se ha producido un repunte en las agresiones a sanitarios —señala un enfermero— y en parte podría paliarse con más vigilancia en los ambulatorios. En el Polígono Sur tenemos, sí, pero a veces un simple guardia en la puerta no sirve de mucho».Entre el profesorado, la opinión es prácticamente unánime. «Por muchos policías que patrullen por la zona explica una maestra de uno de los centros escolares—, si lo que un niño aprende es que hay que resolver los problemas a guantazos o que lo que dice un profesor lo contradice un padre, pues no hay nada que hacer. Hay que invertir en una educación con un concepto más amplio, intentando involucrar más a los padres. Por muy complicado que aquí sea, se trata de ponerse. Eso es el futuro». Otro docente del Polígono Sur no renuncia «a que haya vigilantes también en un colegio, no pasa nada si se hace de una manera discreta todo, pero está claro que si no se educa en el respeto, en escuchar y en no agredir, nada que hacer».