CENTRO GUADALINFO DE CARTAJIMA ha compartido la noticia

La estampa más otoñal llega a la Serranía

Ya quedan pocas castañas por recoger en el fértil Valle del Genal. La cosecha de este fruto seco termina, pero este extenso bosque aún guarda sobre las ramas un regalo para la vista en la zona más occidental de la Serranía de Ronda. La caída de sus hojas, que previamente han tornado su verdor en ocre, conforma un verdadero espectáculo de color en armonía con la naturaleza.Es uno de los mejores momentos para pasear por esta zona montañosa de la provincia, ya sea a través de la carretera que va desde San Pedro de Alcántara (Marbella) a Ronda o desde la que une la ciudad del Tajo con Algeciras. Ambas vías tienen acceso a los extensos castañares que han mutado estos días el color de sus hojas, en vísperas de que éstas caigan inexorablemente sobre la tierra.Pujerra, Igualeja, Parauta, Cartajima, Jubrique o Genalguacil son algunas de las villas que sirven de parada y fonda en este singular recorrido por las imágenes más coloridas del otoño en la provincia de Málaga.Las sinuosas carreteras que las unen no deben impedir el disfrute del viajero, quien debe olvidarse por completo de las prisas urbanas para deleitarse por completo con los miradores naturales que tiene esta zona montañosa.En el lado más septentrional del Valle del Genal se encuentran los castañares más homogéneos, en la zona comprendida entre los municipios de Pujerra y Parauta. Frente a estos pueblos, se localizan arboledas más dispersas, como es el caso de Júzcar o Faraján.En ninguno de los casos, estas poblaciones superan los mil habitantes, lo que les otorga, sin duda, un sosiego con un sello muy rural. Ése es el caso de Parauta, que se encuentra en el inicio de esta particular ruta.Su término municipal está dividido entre la Sierra de las Nieves y el Valle del Genal. De hecho, su paisaje se decanta entre montañas pardas y rocosas y los bosques de encinas, de pinos y, por supuesto, de castaños.Una de sus curiosidades se encuentra en su casco urbano. Allí está una de las encinas más altas de la provincia, conocida popularmente como Valdecilla. Desde Parauta se puede ir a Igualeja o Pujerra retomando la carretera de San Pedro de Alcántara, perdiendo temporalmente las vistas sobre los castaños hasta llegar a Igualeja.En su entrada, el viajero es recibido por el que se conoce como Nacimiento del Genal, en el que se puede comprobar cómo de una gruta mana parte del caudal que da vida a este río. Un poco más abajo, una vez pasado el casco urbano en dirección a Pujerra, se cruza el puente sobre el río Seco, donde merece la pena contemplar el paisaje de los castaños salpicados por pequeñas huertas.De esta forma, se llega hasta Pujerra, donde la leyenda afirma que nació el rey Wamba. Así recuerdan orgullosos en un mosaico y en una escultura dentro del casco urbano. No es casualidad que allí se encuentre la principal cooperativa castañera, ya que es uno de los pueblos con mayor producción.Jubrique es otro de los pueblos donde el castañar tiene mayor presencia, aunque su territorio sirve de frontera natural con la Costa del Sol, a la espalda de Sierra Bermeja.Caso similar es el de su vecino Genalguacil, que suma al colorido bosque de castaños un importante patrimonio artístico en sus calles, gracias a una iniciativa cultural única en el mundo.Al otro lado del valle, a los pies de la sierra del Oreganal, pueblos como Júzcar, Faraján o Cartajima cuentan también con numerosos castaños de la variedad pilonga.En Júzcar, merece la pena también bajar hasta el río Genal, donde se halla la antigua Fábrica de Hojalata, uno de los rincones más hermosos de la comarca, o subir por el paraje de Los Riscos, que comparte con Cartajima. A través de un sendero convenientemente señalizado se comprobará el efecto de la erosión sobre las rocas es el mismo que en el Torcal de Antequera.Hoja de ruta>>Cómo llegar. Para acceder al castañar del Genal se puede ir desde la carretera Ronda-Algeciras o desde la de San Pedro-Ronda. Desde ésta última hay desvíos que posibilitan llegar a Parauta, Pujerra, Igualeja o Cartajima, entre otros pueblos.Cuándo ir. Las dos primeras quincenas de noviembre son idóneas para ver este colorido paisaje.Qué comer. Platos con castaña, mosto y embutidos.Dónde hospedarse>>Dirección. C/. Guardia, 16. 29492 Jubrique Telf. 633 479 967. http://www.retarta.comPrecio. Desde 15 euros por persona.Servicios. Jardín, barbacoa y televisión.Dentro del municipio de Jubrique se encuentran estas dos casas rurales, conocidas como las Retartas Alta y Baja. Entre ambas tienen una capacidad de quince personas en sus diez habitaciones. Destaca la sobriedad del estilo rústico con el que se ha decorado este cortijo. Así se puede disfrutar de una agradable estancia en su amplio salón que dispone de una chimenea que hará más acogedoras las tardes otoñales que se avecinan. «La Retarta» cuenta también con el atractivo de estar ubicado en un entorno natural propicio para el senderismo. Dónde comer>>BuxarraDirección. Calle La Toma, s/n. 29450 Pujerra Telf. 663 420 583/ 650 220 775.Precio. Desde 15 euros.Este restaurante ofrece en su carta platos típicos de la zona, como la sopa refrita. También puede presumir de ofrecer excelentes platos con carne, ya sea de cerdo, ternera, chivo o conejo. Entre los preparados que se pueden degustar también algunas de las setas que se recogen en los alrededores, como la deseada ‘yema de huevo’ (’Amanita caesarea’). No ha de faltar nunca allí el vino mosto casero. En lo que se refiere a postres, se sirven algunos elaborados con la castaña de la zona. Otro de los alicientes de Buxarra es su ambiente acogedor, que se consigue gracias a una decoración con marcado estilo rural.